DELIRIUM TREMEN

No sé si es como un laberinto de muros altos, o como un callejón de dirección prohibida; no encuentro la salida.
Olvido las razones y ya no me acuerdo de quién soy.
Sentada en la acera, trato de recordar el camino que hasta aquí me trajo,recordar el porqué de las lágrimas que ruedan por mi cara o acordarme bajo que árbol enterré mi risa.
O quizás solo quiero recordar el camino de regreso a la felicidad.
Quién se llevó mi fe, qué me robo la pureza, dónde está la belleza, quién violó mi inocencia, en que momento se abrieron mis ojos que ya no duermen, ni sueñan.....
Y construyo tumbas, arañando la tierra, no sé si perdiéndome o buscándome.
Aléjate no sea que tú también te pierdas o te encuentres en la fosa que estoy cavando.

Carmen García Ariza. Efectos secundarios o delirium tremens. Julio 2014

*Advertencia: La autora no se hace responsable de mal interpretaciones imaginarias por parte del lector, recordando que todo lo que escribe se debe a una imaginación desbordante, por la que ya fue castigada convenientemente de pequeña en el colegio de monjas. Por tanto se admiten críticas, opiniones y expresiones de aquello que hace sentir estos relatos, pero no interpretaciones subgénero particulares.

Fotografía: El abrazo eterno.